lunes, 1 de agosto de 2011







LUIS ALDEHUELA GÓMEZ
(1920-2011)

Aldehuela dando los últimos retoques a Jesús de la Agonía

Pintor y escultor.

Intentar resumir en unas pocas líneas la trayectoria vital de este artista, auténtico orgullo de nuestra tierra, es labor muy difícil, sobre todo cuando la amistad que me une a él, y de la que me honro, me haría escribir largo y tendido. Luis Aldehuela nació un dos de marzo de 1920. Desde pequeño se vería rodeado del arte que emanaba la casa donde se crio; y su padre, el pintor escenógrafo y ceramista don Manuel Aldehuela Palomino, se convertiría en su primer profesor. Podemos imaginar al jovencísimo Aldehuela codeándose con Fernando Cruz (padre de los hermanos Cruz Solís) y con el entonces alumno Pedro Castillo. Como otros miembros de su generación, sufrió los avatares de la Guerra Civil. Tras volver del frente, comenzó sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios de Sevilla, donde cursó enseñanzas de ampliación (1939-40), gracias a una pensión otorgada por el Ayuntamiento de Andújar. Después pasó a la Escuela de Bellas Artes de Madrid, donde obtuvo el Premio Fin de Carrera. Durante su estancia madrileña, ayudó a su padre en la decoración de la capilla de la Virgen de la Cabeza de la iglesia de San Ginés.

En 1945 finalizó sus estudios, instalándose definitivamente en Andújar; y cinco años después inauguró su primera exposición, en Madrid. En 1955 contrajo matrimonio con Pilar Alonso, cuyo apellido paterno está unido al arte, en este caso, musical. De esta unión nacieron tres hijas: Alicia, Pilar y Marién, que han conseguido también la protección de las musas.

Un hermoso ejemplo del Aldehuela retratista.
En sus inicios alternó la pintura con la escultura, y trató diversos temas, hasta que decide, a finales de la década de los cuarenta, inclinarse por la cinegética. En su primera exposición, antes reseñada, el crítico de arte Faraldo dijo que era la primera vez que un pintor español se había decidido abiertamente por los temas venatorios. A partir de ese momento, Aldehuela va a recibir infinidad de encargos, y va a exponer en las más prestigiosas salas de España. Sus cuadros forman parte de colecciones particulares españolas, y también de Francia, Andorra, Estados Unidos, Méjico, Suecia y varios países africanos. Pero además, sus escenas de caza han servido para ilustrar los más importantes libros editados en España sobre el tema. Y lo mismo cabe decir de la tauromaquia.

Cuadro de temática cinegética

Un aspecto menos conocido del pintor Aldehuela es su condición de retratista, lo que contrasta con sus divulgadas representaciones de temas romeros. De hecho, sus pinceles dieron forma a los carteles anunciadores de nuestra Fiesta Mayor en los años 1950, 51, 68, 77, 80 y 2000. También son suyos los carteles conmemorativos de los centenarios de las Trinitarias y las Mínimas en Andújar, y el de la Fiesta de las Espigas de 1985. La temática religiosa no se ha centrado sólo en la Virgen de la Cabeza: pintó un San Ildefonso y una Santa Teresa para la capilla de las Capellanías, y el retrato de Sor Lucía Yáñez que se conserva en el convento de Trinitarias. Suyos también son los proyectos que desgraciadamente no llegaron a buen puerto, de camarín para el santuario de la Virgen de la Cabeza (junto a su padre) y de retablo para la capilla mayor de San Bartolomé. No obstante, en los últimos años ha dejado su arte en estos dos templos. Un ejemplo es el Jesús Resucitado para la capilla bautismal de San Bartolomé, su parroquia, que aquí reproducimos.

El Señor Resucitado, en el baptisterio de S. Bartolomé

En 1947 talló la imagen de San Antonio de Padua, también para San Bartolomé, sustituta de la que existió hasta la Guerra Civil en la desaparecida iglesia de San Francisco. Un año después daría forma a la escena evangélica de la Oración en el huerto de los olivos, realizando las imágenes de Jesús de la Agonía y del ángel confortador, prodigiosas esculturas que procesionan en la tarde-noche del Miércoles Santo y cuya hermandad dedicó no ha mucho un homenaje a su artífice.

San Antonio de Padua
El alma sensible de este andujareño universal también ha planeado sobre el arte literario. En 2007 se publicó un relato acerca de su experiencia en los difíciles años de nuestra contienda civil, manuscrito redactado por Luis hace mucho tiempo y que afortunadamente ediciones Plaza Vieja ha tenido a bien mostrar a todos aquellos que admiran la obra de Aldehuela. Se trata de Los últimos que fuimos a la Guerra, donde además podemos encontrar abundante material gráfico y un estudio de Santiago de Córdoba.

Portada memorias de Aldehuela sobre la Guerra Civil

Andújar lo recuerda con el nombre de una de sus calles; con el certamen de pintura (que igualmente se denomina “Luis Aldehuela”); con sus litografías y reproducciones de carteles romeros y monteros que campan por allí y por allá, siendo uno de los máximos exponentes de lo que Alfredo Ybarra llamó en denominar “andujanía”; y ojalá que nunca se olvide la enorme contribución que Luis ha hecho al arte en general y a Andújar en particular.

Falleció en Granada el 4 de noviembre de 2011.


FUENTES:

Datos biográficos aportados por el propio Luis Aldehuela.
ALDEHUELA GÓMEZ, Luis; Los últimos que fuimos a la Guerra. Andújar, Plaza Vieja, 2007.
MESA, Fernando; Carteles de las fiestas y romería de la Stma. Virgen de la Cabeza. Jaén, Caja Rural, 1989.


3 comentarios:

  1. Los reconocimientos, al maestro, le han ido llegando, poco a poco, y todos son merecidos.
    Su San Antonio se merece estar en el Altar Mayor de San Bartolomé de Cultos.
    Y el Baptisterio de San Miguel Arcángel debería sustituir la Imagen de la Virgen de la Cabeza que ahora nos muestra por aquella obra que don Luis Aldehuela pintó, por encargo, para sustituir al lienzo que se encuentra en el conocido como "Cuadro de la Virgen", allá al inicio de la Pontanilla, en la esquina de Mínimas.
    Magnífico blog, Manuel, tenía muchas ganas de poder recuperar todos estos datos que ya había ido leyendo en tus publicaciones. Gracias por acercárnoslas de esta forma.

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  2. Gracias, tocayo. Ciertamente habría que buscar un lugar de preeminencia para el cuadro que dices. Mi hermandad lo utilizó el primer año que montamos la cruz, en Santa Marina. En cuanto a los reconocimientos, creo que ha faltado un homenaje institucional por parte del ayuntamiento, igual que ocurre con otras personalidades andujareñas. Por desgracia, Andújar no es muy constante y el bello acto que se celebró hace unos años en la plaza de España para reconocer la carrera artística de Diego Llori no ha tenido continuidad. Deberían nuestros munícipes tener más sensibilidad para con aquellos que dentro o fuera de la ciudad le han dado lustre. Ahí está el caso igualmente sangrante, y que tú lo has apuntado en más de una ocasión de Pedro Palenciano. Y lo mismo se puede decir de otros muchos.
    En cuanto al blog, mi intención es divulgativa. Voy a comenzar por los biografiados en El Nuevo Guadalquivir y después ampliaré el listado con nuevas incorporaciones.

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  3. Me encanta poder ver a mi padre en este blog y los agradecimientos de quienes lo tratasteis y lo habeis disfrutado tanto....espero seguir viendolo en sus obras y verlo asi entre nosotros.....sé que estaria contento de ver que no nos olvidamos de él facilmente.

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